martes, 6 de enero de 2009

CUMPLEAÑOS










DAS # 43









Mil ciento noventa y ocho millones trescientos sesenta y ocho mil segundos,
los que lleva latiendo un corazón.

Diecinueve millones novecientos setenta y dos mil ochocientos minutos, 
además, sin dejar de respirar... 

Trescientas treinta y dos mil ochocientas ochenta horas, 
ya son unas cuantas de vuelo. 

Trece mil ochocientos setenta días, cada uno con sus noches. Sus noches... 

Mil novecientas setenta y seis semanas, 
esperando el final de cada una de ellas. 

Cuatrocientos cincuenta y seis meses, 
cuatrocientas cincuenta y seis veces. 

Siete con seis lustros, 
en cada uno te das cuenta de lo que cambia todo... 

Tres con ocho décadas,
cada una de ellas te marca una gran etapa. 

Treinta y ocho años. Los que cumplo... 

...¿Felicidades? 

david.sac, enero 2009

jueves, 1 de enero de 2009

ULTIMA BAZA




Miradas perdidas.
Caminos helados de desconcierto...
Palabras omitidas,
gestos opacos...
Tú lo sabes, te quiero...


Te quiero entre quiebros,
te quiero a momentos...
Y muero...
Muero por tus labios,
por tu sangre cálida
que encarna tu viso...


Viso ambiguo que me vuelve loco...
me siento despojo, gritando en silencio.
Esquizofrénico aullido que llega a la nada,
al eco de tus oídos que ignoran cada palabra.


Y me duelen tus caricias,
Me duele tu mirada...
Porque yo te siento
Y tú...quisiera saber...
Si sientes algo o nada.
Fría amazona, rosa con espinas.
A veces,
blanca cuando duermes y te miro,
sumergida en tus sueños
preguntándome si en ellos yo existo.


¿Soy un sueño?
¿Acaso yo me lo invento?
Me invento tus labios,
me invento mi aliento,
cubriendo tu cuerpo.
Me invento tus saciados suspiros
cuando dentro de ti me encuentro.


¿Acaso me lo invento?


Me he cansado de éste juego...
Se acaba la partida aunque yo no lo quiero...
No tengo faroles...yo no los tengo...


Dime lo que quieres,
sabes que te quiero...
Pero me retiro... esto es un infierno,
Una pérdida de tiempo...
Y en mi desconsuelo...me destruyo...
Me mutilo arrancando pedazos de mi alma
Cada vez que te pienso.
Te pienso...


Así pues prefiero perderme en las nieblas
del olvido, pensar que no has existido.
Que fuiste un cuadro en una casa de campo
en la que estuve alguna vez...y quedé hipnotizado.


Caprichoso azar el que te puso en mi camino.
Y ahora no sé si seguir por el sendero...
O saltar al vacío...


Perderme en mí mismo...
En el silencio de tu recuerdo
Volviendo negro el matiz de tus gestos.
Dulce nostalgia bella de algo nunca vivido...
Perdida irreparable de lo que nunca he tenido...


Si entiendes la sutileza de mis latidos llamando a tu puerta
Ábremela... y seré tuyo y contigo...
Si no me iré... sin mirar atrás...

...adentrándome en el desierto
de mi existencia sin ti...